CDMX, 18 de febrero de 2020.
No se puede calificar el encuentro de ayer en la Arena Ciudad de México en el décimo Congreso Nacional de la CATEM de otra manera, que no sea de «Fiesta», pluralidad, nuevo Sindicalismo Mexicano y de buenos bríos para la clase trabajadora.
El poder y el apoyo que le mostró Pedro Haces Barba, líder nacional de la CATEM, al Presidente Andrés Manuel López Obrador, a sus invitados de lujo y a sus agremiados, fue de tal magnitud y de tal euforia, que el inquilino de Palacio Nacional no dejó de sonreír, de aplaudir y de mandar abrazos (que se daba el mismo) a la clase obrera, al sindicalismo organizado y a los empresarios que se dieron cita en el Congreso.
En el podium, además de los referidos AMLO y Haces, se encontraban Ricardo Monreal en representación del Senado, Luis María Alcalde de la Secretaria del Trabajo, Francisco Cervantes de la CONCAMIN, Alejandro Murat del Gobierno de Oaxaca y José Manuel López Campos de la CONCANACO SERVYTUR.
El mensaje estuvo impregnado de manifestaciones de respeto a los derechos obrero-sindicales, de halagos a la 4T por haber incrementado el salario en dos años consecutivos, de innovación y visión, en donde dejó en claro que la actividad de la subcontratacion es por el bien del empleo bien remunerado, de apoyo a las pequeñas empresas y para el crecimiento nacional, y expresó el reto que se tiene ante la llegada de la Revolución Industrial 4.0 que no es más que una versión moderna de la robotización del pasado, la cual siempre se ha superado.
Otros invitados que se pudieron ver en el evento, fueron los líderes sindicales Víctor Flores de los Ferrocarrileros, Ricardo del Valle de los Sobrecargos, al Obispo emérito Onesimo Cepeda, al empresario Carlos Peralta de IUSA y hasta el ex PRDista Armando Ríos Peter.
Es tiempo de tomar en serio a Pedro Haces Barba, quien se apuntala como un Caballo Negro para las próximas elecciones, ya que cuenta con el ánimo y la empatía de todos los sectores y de todos los colores políticos, pero sobre todo, del Presidente de la República.
Al que no se le vio por ningún lado, y le aplicaron el «Fuchi, Guacala», fue a otro líder sindical que además es Senador, a Napoleón Gómez Urrutia «Napito», y cuentan los organizadores que dados los escándalos de corrupción de él y de sus hijos, de sus iniciativas de retroceso nacional, y el antagonismo que representa con un Líder carismático y de Unión como lo es Pedro Haces Barba, «Napito» hubiera ensuciado con su simple presencia el evento, además de haber quitado la felicidad que el Presidente esbozó como en sus momentos más felices de campaña. ¿Será que lo quieren alejar desde «ya» de la foto?
